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Sobre la rama de un árbol,
se mece el invierno.
Y se mece el canto
de un pajarillo azul.
Sus alas tan quietas,
Protegen su cuerpo,
Del hielo y la nieve
Que va cayendo.
Su canto se pierde
cuando sopla el viento,
cuando se confunde
Con su llanto lastimero.
El invierno canta,
La canción a dueto.
De trinos y murmullos
Que se congelaron.
El tiempo parece
Que se queda quieto,
cuando las risas de los niños
se han marchado.
El invierno canta
Y el día oscurece,
No hay pasos que crucen,
el frío silente.
Y luego en la noche,
Los cantos se duermen,
Se duerme el invierno
¡Se duerme!
¡Se duerme!
© Esperanza E. Vargas
Sadeyes 
Hola Esperanza, muy hermoso, ese canto de invierno, que aun se escucha a pesar del frío, de la nieve y el hielo, bello, abrazo grande
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Se nos adelantó el Invierno amiga.
Aún así la belleza de la vida se manifiesta y nos inspira.
Un gusto que estes aquí Themis.
Un abrazo gigante y con mucho cariño.
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Cómo te he dicho en el otro lado, hermoso poema al invierno 😍
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Muchas Gracias Carmiña
Por estar presente en mis versos.
Te Quiero
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Cada estación nos regala su belleza más allá que nos guste más el frió, o el calor. Solo hay que saber mirar, escuchar y palpar. Dios nos regala esos cambios climáticos para que podamos descubrirlo a Él y su omnipotencia. Para escuchar el entorno necesitamos hacer silencio en nuestro interior. ¡Muy bonita! Abrazos
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